Los últimos del .. ¡agua va!

Estos últimos, meses, días he visto (quizás es que me fijo más) a personas realizando actos cuanto menos poco cívicos, con una naturalidad propia de la interiorización y de la normalidad asimilada. Hablo de tirar basura por la ventanilla del coche, de personas tirando al suelo la publicidad de su parabrisas, chicles, envoltorios, cigarros…por otro lado en el super padres/madres comprando procesados, bollería industrial de una forma exagerada;  congelados, donuts, pandorinos, tigretones… ( el último, un niño de +/- 9 años ya con problemas visibles de sobre peso).

aguava

Entonces me hacia la reflexión, » a ver si el problema va a ser mío», que soy muy exigente, que me he pasado de frenada… Al pensamiento me ha venido un grito, ¡AGUA VA!   aquello que me contaron en clase de historia cuando era un joven inquieto. Una expresión que posee un origen ciertamente escatológico. En épocas pasadas, cuando aún no había en las casas sistemas de desagüe, era costumbre arrojar por los balcones y ventanas que daban a la calle las aguas sucias, orines y demás inmundicias. Para advertir a los transeúntes del peligro, se daba unos segundos antes el grito de «¡agua va!». Al escucharlo, la gente se apresuraba a buscar un lugar seguro para guarecerse del sucio chaparrón.

La reflexión continuaba con «seguro que fueron algunos los primeros de lo obvio, dejar de hacerlo; que era una guarrada que producía suciedad, enfermedad e incivismo». A la vez habría otros que lo verían natural, e inocuo: «eso no pasa na, si luego llueve y se va», «sino ¿dónde lo tiro?» «el ayuntamiento se tendría que encargar de recogerlo»…

Hoy en día, s XXI,  todavía hay gente que no sabe mantener limpia su ciudad, que no le da importancia al plástico que utiliza, que pasa del trasporte sostenible, que tres basuras le ocupan mucho, que desconfía y piensa que luego todo va a parar al mismo sitio, que tampoco le da importancia a lo que compra: alimentos, cosmética, productos de higiene de limpieza, ropa, objetos varios y mucho menos se fija en su huella ecológica, de dónde viene, cómo estará producido, en qué condiciones… todavía hay gente que grita ¡AGUA VA!

 

 

Ignorancia, pesimismo, inmovilismo, negación. Desde el otro lado, ya hay gente que no tira sus sobras por la ventana, que además se preocupa por contagiar, que piensa en hacer camino, que la verdad se contagia y triunfa con el paso del tiempo.

Y tú ¿ qué tipo de gente eres?

Anuncio publicitario

Un comentario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s